Xurde Menéndez y Gerardo Zapico animan los viajes de la peña Casa Kilo. “Ahora nos ponen pegas para entrar con la gaita al campo”, dicen
Gijón Pablo ANTUÑA
Es habitual que en los desplazamientos del Sporting se oiga con un toque peculiar el himno del Sporting, y otra serie de canciones populares. Si eso sucede, allí están los gaiteros de Quintes, Xurde Menéndez y Gerardo Zapico. “Más asturiano que una gaita hay pocas cosas. La gente lo aprecia y lo valora, lo baila y se anima”, destaca Xurde Menéndez. Tomando el testigo de otro histórico de la gaita, Turu, de la peña Mliayo de Villaviciosa. En Quintes animan con su toque musical los desplazamientos de la Mareona. Y lo llevan haciendo durante la última década. El tiempo que lleva existiendo la peña Casa Kilo de Quintes, de la que son miembros.
El himno del Sporting o el de Asturias, junto a música tradicional asturiana como “El Santa Bárbara Bendita”, “Cuando yo Fui a Covadonga” o “Chalaneru”, forman parte del repertorio de Xurde y Gerardo, además de alguna muñeira. “Es la mejor forma de animar el ambiente en la previa, y para celebrar la victoria después o consolarnos si perdemos”, cuenta Menéndez.
No obstante, la normativa de la Liga es cada vez más restrictiva para entrar a los campos, y eso ha provocado algún disgusto en la época reciente. “Alguna vez me pusieron problemas, y ahora a los estadios no la suelo llevar porque mi gaita está hecha de madera y no quiero estropearla”, relata Xurde Menéndez. “Ahora cada vez nos ponen más problemas para entrar con la gaita al estadio, por eso la dejo en el autobús poco antes de entrar. Lo que pasa es que muchas veces la echamos de menos al acabar el partido, cuando tenemos que estar más tiempo en la grada o mientras salimos para celebrar el triunfo o consolarnos si perdemos”, abunda Zapico.
Este año la gaita de la peña Casa Kilo ya sonó en el viaje a Granada, en el dut de José Alberto con victoria, y está previsto que lo vuelva a hacer en Zaragoza allá por el mes de mayo, poco antes del final de liga. Pero uno de los momentos más memorables tuvo lugar el pasado año en Córdoba, cuando Xurde y Gerardo levantaron a toda una plaza llena de aficionador andaluces. “Del Spoting éramos pocos, empezamos a tocar como siempre en la sesión vermú y la gente empezó a animarse, aplaudir y pedirnos más canciones. Si llegamos a pasar la gorra nos forramos”. Recuerda entre risas Xurde Menéndez.
En su caso tiene 28 años y empezó a tocar con solo 10. Forma parte de la banda “Noega”, y tiene un buen recuerdo de la primera Mareona en la que se animó a tocar la gaita. “Fue en Salamanca, en el año 2006, en un partido que ganamos por la mañana con gol de Pedro. Me arranqué a tocar en la plaza Mayor en los instantes previos al partido”, destaca antes de señalar que ahora se ve obligado a continuar la tradición. “Cada vez que me subo al autobús es lo primero que me preguntan, que si llevo la gaita. Si no, no me dejan ir con ellos”, dice sobre sus compañeros de la peña Casa Kilo de Quintes.
Zapico reside en Madrid por motivos laborales, pero regresa en cuanto puede a Quintes para vivir el sportinguismo, y se une a sus compañeros siempre en los viajes. “Empecé a tocar la gaita hace 12 años, con cuarenta, y porque mi mujer se quedó embarazada y ya estaba apuntada a un curso en el colegio de Quintes. Para no perderlo fui yo a las clases”, destaca. ”La primera Mareona en la que toqué fue en un partido en Santander. Ahora veo la gaita como algo fundamental para animar la Mareona”, añade.
Fuente: LA NUEVA ESPAÑA