Situado a la derecha de la playa, en las proximidades de la curva de Villaverde, sirvió como atraque a pequeñas embarcaciones de pesca utilizadas por los vecinos
Guillermo Tuero |
Una de las primeras lanchas que utilizaron el embarcadero ha sido la popular “Pitagoras”, fabricada en madera y con 470 Kg. de peso para mover a remo. La lancha fue matriculada y bautizada por Guillermo Tuero Morís en el año 1945. Guillermo ha sido uno de los muchos pescadores artesanales de Quintes que combinaron el duro oficio de pescar con otras actividades para mejorar la economía familiar.
Durante más de dos décadas "Pitagoras" se dedicó principalmente a pescar centollos con espejo, sistema que consiste en localizarlos desde la embarcación mediante un mirafondos y un gancho con dos o tres dientes provisto de una vara que puede tener diferentes longitudes, según la profundidad a la que se trabaje, y que sirve para enganchar y subir la pieza.
Una vez finalizada la marea los pescadores se acercaban con sus lanchas a la zona conocida como "La Barquera", las subían al pie del acantilado y las dejaban encima de la que hoy conocemos como “piedra la lancha”. Debido a las dificultades para subirlas, los pescadores José Antonio Rodríguez y Carlos Morís instalaron un cabestrante fijo en la roca para izarlas, un artilugio que la mar acabó destruyendo sobre el año 1990.