46 descendientes de Victoriano Pidal
Varas, y Encarnación Caicoya Palacios, la mayoría de ellos residentes en
Madrid, celebraron el sábado con una misa y un banquete en
el Rte. Casa Kilo su tradicional encuentro de verano.
Para esta familia numerosa el
encuentro se está convirtiendo en una cita habitual del mes de agosto, donde
tienen la oportunidad de intercambiar anécdotas, inquietudes y recordar el árbol genealógico sacando el orgullo de
formar parte de él.
Las raíces de esta familia se
remontan al año 1917 cuando el mundo aún vivía convulsionado por la primera
Guerra Mundial. Ese año Victoriano Pidal Varas, que vivía en el Regatón, se
casa con la también vecina de Quintes Guadalupe Piñera Álvarez.
Fruto del matrimonio llegó
Adosinda la primera hija. Pronto la suerte volvería la espalda al matrimonio,
Guadalupe, otra vez embarazada, enfermó de tuberculosis y después de dar a luz
a su segunda hija Luisa, falleció el 27 de Junio de 1919.
Victoriano siguió luchando por
sus hijas y el día de San Bartolomé de 1921 rehízo su vida casándose de nuevo
con la vecina de Quintueles, Encarnación Caicoya Palacios. De aquel matrimonio
nacerían otros 10 hijos: Cristina, Aladino, Carmina, Selmira, Nieves, Jose,
Luis, Antonio, Encarnación y Ernestina.
Entre 1955 y 1960 Victoriano fue
presidente del GRUPO CULTURAL Y DEPORTIVO de Quintes, cargo que no le impidió seguir con
sus aficiones de siempre; jugar a las cartas, tocar el acordeón y escribir
coplas. Victoriano y Encarnación, fallecieron en Coslada, el 14 de Noviembre de
1975 y el 28 de Agosto de 1978 respectivamente
A pesar de la edad, Carmina, Selmira, Nieves, Antonio, Encarnita y Ernestina, siguen reuniendo todos los años a sus descendientes en una comida de hermandad para compartir buenos momentos entre todos. Salud para que disfrutéis de este día y de la tierrina durante mucho tiempo.
