30 diciembre 2019

Dos nuevos argayos afectan a la ladera de la carretera de Quintes a playa España

El ingeniero municipal recomienda realizar un estudio de la escorrentía por todo el terreno para frenar los continuos desprendimientos 

ALICIA GARCÍA-OVIESVILLAVICIOSA. Lunes, 30 diciembre 2019 
El Ayuntamiento de Villaviciosa deberá realizar un estudio de gestión de la escorrentía por toda la ladera de la carretera de Quintes a playa España para intentar frenar los constantes desprendimientos que afectan al terreno, como así lo aconseja un informe del ingeniero municipal. La naturaleza de la superficie, cuya inestabilidad se acentúa en periodos de grandes precipitaciones, hacen previsible que se produzcan nuevos argayos como el que hace dos meses obligó a cerrar la vía al tráfico durante varias semanas, debido a que parte de la cimentación había quedado en el aire y ponía en riesgo la seguridad de los conductores. 
La actuación, que tuvo que realizarse con carácter de urgencia, consistió en construir una escollera y un sistema de cunetas, drenaje y conducción, con el objetivo de evitar que el agua de escorrentía que generó el desprendimiento pudiese seguir fluyendo en la zona del argayo. También se llevó a cabo el saneo y ejecución de capa de base y rodadura con suelo seleccionado, zahorra artificial y aglomerado. Medidas que supusieron un desembolso de 92.855 euros. 
Durante el transcurso de dichas obras, se produjeron otros dos argayos de menor envergadura próximos a la zona afectada, a unos 300 metros en cada sentido, que se solventaron con retirada del material y perfilado. A ellos se suman ahora otros dos nuevos desprendimientos, «en un radio de 500 metros desde la afección principal y que aportan material a las vías». Ambos se encuentran señalizados sin que se produzca estragos graves en la circulación o en la seguridad y «serán retirados cuando las circunstancias permitan un mejor aprovechamiento de los medios necesarios». 
Además, aunque se ejecutó un nuevo tramo de cuneta y se mejoró el cauce de la escorrentía ladera abajo, se sigue observando un gran aporte de agua en la zona de la obra principal. «Esta circunstancia es preocupante desde el punto de vista de que puedan surgir nuevos desprendimientos en un futuro. Como medida preventiva y fuera de las actuaciones contempladas en esta ocasión, podría ser conveniente realizar un estudio de gestión de la escorrentía por toda la ladera, ejecutando un sistema de cunetas, caños y drenes, auxiliando el camino, que pudiesen repartir mejor el caudal aportado por las lluvias», explica el ingeniero, pero -añade- «no existe medida preventiva que, debido al material de la ladera, asegure la estabilidad absoluta de la misma».
Fuente. EL COMERCIO
Un coche circula por la carretera de acceso a playa España tras las últimas obras. / JORGE PETEIRO