25 agosto 2025

Fiestas de San Bartolomé 2025 en Quintueles

Quintueles disfruta de un colorido desfile de carrozas, homenajea a Mari Bastián y vive con devoción el día grande de las fiestas

El centro de la fiesta de ayer estuvo en Casa Nicasia y en la iglesia. El emblemático restaurante se despedía de clientes y amigos el mismo día de su apertura hace 83 años, y Mari Bastián recibía del Ayuntamiento y de los vecinos un cariñoso homenaje tras 58 años al frente del local con total dedicación, y por hacer de casa Nicasia un referente en Quintueles. Mari recibió emocionada una maqueta del escudo de Villaviciosa con una inscripción de su trayectoria que le entregó el alcalde Alejandro Vega. Poco después decenas de fieles llenaban la iglesia en una misa solemne en recuerdo a uno de los santos más venerados de Quintueles. y que un año más contó con la participación del coro San Clemente de Quintueles y el Grupu Folcloricu Les Xanines de Quintes, 

Mari Bastián se jubila tras 58 años regentando un local donde no hubo experimentos ni tendencias modernas, manteniendo la esencia de cuando se fundó. El restaurante es uno de los pocos que seguía cocinando con cocina de leña y a fuego lento los sabrosos guisos asturianos. 

El bar se inauguró el día de la fiesta de San Bartolomé de 1942 por Nicasia Menéndez y Luis Piñera, un matrimonio de emprendedores que habían construido un pequeño chigre-tienda junto a la iglesia de Quintueles llamado El Descanso. Un espacio que vendía un poco de todo al mismo tiempo que servía también como lugar de encuentro entre vecinos y que llegó a ser restaurante de referencia con la cocina casera como protagonista.

Una vez retirada Nicasia en el año 1967, continuó regentando el negocio su nuera Mari Bastián, que ahora se jubila. Entonces Mari era una joven cocinera que con su buen hacer triunfó pronto en los fogones y situó el restaurante entre los más populares de la zona, respetando el nombre del local y la cocina de leña como la de Nicasia. De allí salieron durante años los platos más exquisitos con los mejores productos de la tierra, como Fabada, Pote, Menestra, Llámpares, Pulpu con patatines o el Arroz con leche. Atrás quedan 83 años de historia y recuerdos de un restaurante que fue lugar de encuentro vecinal y de largas charlas en torno a la buena mesa

Un claro ejemplo de amor por la gastronomía, donde lo que cuenta es el trabajo bien hecho. ¡FELIZ JUBILACIÓN MARI!

 Como ya es tradición, vecinos y visitantes disfrutaron a primera hora de la mañana con un desfile de carrozas engalanadas por los residentes de los diferentes barrios. El desfile estuvo acompañado durante todo el recorrido por la banda de gaitas La Laguna de San Claudio de Oviedo y también contó este año con la participación de Les Pandereteres de la Providencia en una de las carrozas. La participación ha sido la nota predominante al paso de las carrozas ya que ningún vecino quiso perderse el desfile. Una tradición que viene celebrándose en Quintueles desde el año 1978 cuando Tano Ordieres y algunos vecinos más empezaron a crear afición y a sentar las bases de un evento que tiene ya 47 años de antigüedad.

Terminado el desfile y una vez aparcadas las carrozas en el prau anexo a la iglesia, comenzaron los actos religiosos. Una misa solemne en honor de San Bartolomé que fue presidida por José Eduardo Zulaiba de la iglesia de Fátima, acompañado por el párroco Maximino Canal, dos sacerdotes y el vecino  de Quintueles Yeray.

En una de las reflexiones de la homilía, José Eduardo mencionó “lo desagradable que es escuchar las noticias en la actualidad, guerras, incendios y pérdidas de vidas humanas que nos dejan sin capacidad mental para luchar contra esta cultura del desastre, por eso es tan importante estas fiestas que celebramos para reforzar un poco nuestros sentidos y el ánimo para seguir adelante”

Finalizada la procesión y los actos religiosos, donde participó el Grupo de Baile Les Xanines,  la celebración continuó en el prau de las carrozas y en casa Nicasia, en el prau se rifó del ramu y se degustaron pinchos y sidra, cortesía de los participantes en las carrozas en el prau, al mismo tiempo que Les Xaines ofrecían un recital de baile frente a la iglesia. Por su parte la terraza de Casa Nicasia estuvo muy concurrida durante todo el día por vecinos, clientes y amigos que alargaron la despedida hasta bien entrada la tarde.

 Ayer tampoco faltaron a la fiesta el tradicional grupo de senderistas de la asociación vecinal de Somió que lidera Soledad Lafuente y que cada año viene caminando desde Gijón hasta Quintueles el día grande de San Bartolomé. Una tradición que siguen respetando desde hace más de 70 años varias generaciones de familiares y amigos. Nos contaban ayer en casa Nicasia los actuales senderistas que sus antepasados bajaban hasta la Ñora, donde dejaban la comida en casa del Polainu para volver después de misa al bar a compartir la pitanza. En la actualidad salen de la iglesia de Somió, vienen por el Camín del Molin hasta el antiguo bar El Mariñán donde son recibidos por la comisión de fiestas con una pancarta de bienvenida.

Hoy cierran las fiestas de San Bartolomé de Quintueles con una misa en honor a la Virgen del Rosario. Atrás quedan dos días de celebraciones donde reinó la gastronomía, las verbenas y los juegos tradicionales.





Carrozas


Homenaje a Mari Bastián de casa Nicasia

Misa solemne






Procesión


Prau de las carrozas después de misa

Terraza de Casa Nicasia a medio día

Mari con familia y amigos


Bienvenida de la comisión de fiestas a los vecinos de Somió

Parte de los vecinos de Somió con Soledad Lafuente