El entorno de la iglesia acogió ayer un emotivo acto de homenaje a los campaneros fallecidos, donde además
del pregón de Isabel Álvarez y un concierto de campanas se descubrió un
monolito con una placa cedidos por un vecino
Esta es la tercera edición del
evento que se celebra en Quintes por iniciativa de Francis Menéndez para
recordar a nuestros antiguos campaneros y mantener viva una tradición
milenaria, donde varios participantes han vuelto a repicar dos campanas de
diferente tamaño y sonido grave, refundidas en 1963 con material campanil
aportado por los vecinos.
Con el pregón de Isabel Álvarez, natural
de Quintes y vecina de Rovigo, arrancaba ayer el acto de homenaje a los campaneros, Un texto dedicado a las campanas del que os
dejamos algunos fragmentos “A mí me gusten les campanes, cuando suenen tengo
que parar a oiles porque siempre me dicen algo. Hace unos años sonaben para avisar que había un incendio, ahora hay que avisar a los bomberos
y en algunos casos igual lleguen primero los vecinos con los calderos, otres
veces hablaben de fiestes, de celebraciones, de misas, y otras de cosas más
serias cuando algún vecin pasaba a mejor vida.
En estos pueblos marineros
nuestros campaneros son un lujo, los queremos y admiramos, ellos son los que
hacen que les campanes se expresen y este año van a tocar para decirnos que en
Quintes y Quintueles tocó la lotería…bueno la lotería del amor, la salud y la
paz.
Felices fiestas, feliz año y que
el próximo lo podamos volver a estar aquí todos juntos, al son de les
campanes, la gaita y el tambor”
Tras el pregón familiares y
amigos de campaneros fallecidos descubrieron y colocaron flores al pie de una
placa donada por un vecino en memoria de los campaneros, acompañados con música
de gaita y tambor.
Finalizado el acto de homenaje,
los campaneros, Teo el gemelu, Santi hijo de Sebastián, Jaime nieto de Sebastián,
Abel de casa Kilo, Xurde Menéndez, Juan Carlos y Francis Menéndez, subieron al
campanario para participar en un concierto de campanas dedicado a antiguos
campaneros de Quintes y Quintueles.
Es la tercera vez que vecinos aficionados al toque manual de campanas, despiden el año con un
concierto que tiene como objetivo recordar a antiguos campaneros fallecidos y
poner en valor una tradición milenaria que ha ido pasando de generación en
generación. En este concierto estuvieron en el campanario tres generaciones de
campaneros: Abel de casa Kilo, Jaime nieto de Sebastián y el resto de los
participantes.
CAMPANEROS Y COLABORADORES Roberto, Abel, Teo, J, Carlos, Santiago, Xurde, Jaime, Jorge y Francis |
Francis e Isabel Álvarez preparando el pregón |
J. Carlos, Jaime, Abel y Diego, descubren una placa en recuerdo de los camapaneros |