Veinticinco socios del Club Vespa
Cangas de Onís hicieron ayer una ruta entre Cangas de Onís y Quintes, donde compartieron
una comida de hermandad en el Rte. Casa Kilo
Este evento es uno más de los que que acostumbra celebrar el Club Vespa a lo largo del año. En esta ocasión la caravana
salió a primera hora de la mañana de Cangas de Onis y tras un largo recorrido por diferentes
localidades asturianas llegó a la Carbayera sobre las tres del medio día.
Entre los aficionados a las motos
clásicas que participaron ayer en la ruta estuvo Ismael Miranda, del taller de
Lin, con su Vespa 150 S. Ismael, gran aficionado a la restauración de motos
antiguas, tiene una colección de ocho reliquias del pasado rehabilitadas por él
a lo largo de su vida profesional. Soriano (modelo Pantera); Vespa (modelo 150
S); Montesa King-Scorpion 250 cc.; Montesa Brio 110; M V Agusta 150 cc; Guzzi
Hispania 650 cc (Saltamontes); Montesa comando 175, y Montesa Kenia, forman parte de una colección que guarda como oro en paño.