Las obras de mejora en el templo, impulsadas por el
párroco Maximino Canal y un grupo de vecinos, ascendieron a 19.900 euros
La parroquia de San Fabián y San
Sebastián, luce ya como nueva tras las actuaciones de pintura y reformas llevadas a cabo con donaciones de vecinos,
Sociedad Clarín, Comisión de Fiestas de Santa Ana, Grupo de baile Les Xanines,
Asociación La Parpayuela, Maderas Vallina, Iglesia y Ayuntamiento.
Las tareas de mejora y mantenimiento realizadas, consistieron
en la renovación total de pintura interior y exterior, limpieza
de la piedra del campanario, colocación de nueva madera, tableros fenólicos y
onduline bajo teja en las zonas del techo del pórtico en mal estado, colocación
de falso techo de escayola, instalación de
plafones de luz y restauración total del suelo en la zona porticada.
Para ello se contó con la intervención de profesionales y con la colaboración
desinteresada de varios vecinos.
Estas obras de mantenimiento son
las más importantes llevadas a cabo en los 71 años de antigüedad que tiene la iglesia. El
edificio, con un importante deterioro en la estructura del techo del pórtico, desconchados en las paredes pintadas y zonas de fachadas que no se habían pintado nunca,
presenta en la actualidad una imagen remozada para el futuro, y que lucirá
especialmente el próximo lunes, día 26, con motivo de la fiesta de Santa Ana.
Hace tres años que Quintes acometió también la reforma del cementerio anexo a la iglesia por el mismo procedimiento, es decir, con donaciones de los vecinos y la iglesia. En aquella ocasión las obras consistieron en la construcción de una rampa de acceso para eliminar barreras, reconstrucción de la acera del fondo del cementerio, repaso y retejado del techo de los nichos, sustitución del canalón de zinc por aluminio lacado en interior y fachada con dos bajantes y rejillas de desagüe en las aceras, instalación de luz, reparación y pintura del portón de entrada y dos puertas interiores, extendido, relleno y regularización de la zona verde del cementerio con tierra vegetal. Estas obras fueron realizadas por contrata y con la colaboración desinteresada de varios vecinos. Como remate final, la propia iglesia aportó el dinero para pintar interior y exteriormente el cementerio.
QUINTES Mirador del Cantábrico
Fotos cedidas por Silvino Ferreras
Foto cedida por Begoña Cespedes