La misa de ayer fue presidida por el sacerdote José Manuel Pidal, ordenado en la iglesia hace 50 años, y cooficiada por Maximino Canal y José Luis Suarez
Los actos religiosos, condicionados por las nuevas normas que impone el coronavirus, contaron con gaita, tambor y la participación del coro de Quintes que dirige José Ramón Morís. La celebración finalizó con una procesión alrededor del cementerio entre voladores y el repique de campanas de Sebastián Pidal.
El sacerdote José Manuel Pidal anunció su próxima jubilación después de 50 años de sacerdocio y donó a la parroquia un incensario como recuerdo de su ordenación.
Finalizada la misa se sorteó un jamón para ayuda de gastos de la iglesia, resultando agraciada la vecina Marisol Fernández.
Como ya es tradición los actos religiosos de Santa Ana continúan hoy con misa a la Virgen del Rosario y finalizan mañana con otra misa por los difuntos de la parroquia. Ambas a las 12,00 horas del mediodía.
Cuatro años después de la recuperación de las fiestas por un grupo de vecinos, la crisis del coronavirus ha llevado de nuevo a la cancelación de las celebraciones en el prau. Para la folixa hay que esperar, ahora toca animar a la comisión para que el próximo año podamos volver a disfrutar de nuestras fiestas de SANTA ANA al completo.
Foto de hoy lunes 27 de julio (Imagen Virgen del Rosario en procesión) |