A las 9,30 aun no había amanecido y el color rojizo del cielo anunciaba que algo extraordinario estaba sucediendo.
Poco después los medios de comunicación ya informaban que nubes bajas de ceniza y humo estaban cubriendo la región. Las condiciones atmosféricas y los 35 incendios activos en Asturias estaban provocando una especie de eclipse que impedía pasar la luz del sol,
La expectación y la alarma, con 35 fuegos ardiendo, fueron ayer las protagonistas de un día triste que año tras año se repite. La mano del hombre, el cambio climático y las políticas de prevención son algunas de las causas por las que ocurren este tipo de catástrofes medioambientales y humanas que es urgente atajar.
La expectación y la alarma, con 35 fuegos ardiendo, fueron ayer las protagonistas de un día triste que año tras año se repite. La mano del hombre, el cambio climático y las políticas de prevención son algunas de las causas por las que ocurren este tipo de catástrofes medioambientales y humanas que es urgente atajar.