Aprovechamos la proximidad de las
“XXXIV Jornadas Gastronómicas” para dedicar un recuerdo especial a Nicasia
Menéndez Rubiera de Quintueles y a Carmen Tuero Morís (Mina) de Quintes. Dos
mujeres que a mediados del pasado siglo fomentaron el valor gastronómico de les
llámpares y su comercialización.
La cosa no pintaba nada fácil,
una necesitaba promocionar en su chigre de Quintueles un producto culinario
poco conocido y la otra debía comprometerse a pelar y suministrar llámpares
suficientes desde Quintes, con el agravante de que Mina carecía de medios de transporte
y tenía que llevar les llámpares andando por los atajos hasta Quintueles.
Nicasia y Mina formaron un tándem
perfecto durante aproximadamente unos doce años. En ese tiempo, las condiciones
de vida habían mejorado, empezaba a surgir nuevos trabajos, la demanda en casa
Nicasia había crecido y Mina dejó el oficio de peladora. Además otros locales
de la zona ya disponían de llámpares en sus menús y llegaron peladores más
jóvenes que siguieron surtiendo al bar El Descanso y otros negocios hosteleros de Quintes
y Quintueles.
De una u otra forma, estas dos mujeres hicieron historia elevando la llámpara a la categoría de mesa y mantel. Fallecidas hace años, recibieron en vida el
reconocimiento de la Sociedad Clarín que les brindó sendos homenajes en 1991 y
2009 respectivamente.
Con el paso del tiempo, les
llámpares se han ganado un hueco especial en las cartas de los restaurantes de Quintes y Quintueles. Treinta y cuatro años de promoción por parte de la Sociedad Clarín, hacen que cada año aumente su popularidad.
Ya están muy próximas las XXXIV Jornadas Gastronómicas y como siempre el evento será lugar de encuentro para centenares de personas que no dejaran pasar la ocasión de participar y degustar les llámpares en sus diferentes formas de preparación.
QUINTES Mirador del Cantábrico
Nicasia MinaNicasia y familiares, frente al Bar El Descanso