Los vecinos la arreglaron hace dos décadas y la han mantenido hasta la fecha. «Ya no podemos asumirlo, debería hacerse cargo de la limpieza el Ayuntamiento», afirman
E. RODRÍGUEZQUINTES. Viernes, 18 octubre 2019, 07:54
Para los vecinos de Quintes, la fuente La Viesca -que data de 1800- es uno de «los rincones más guapos de la parroquia». Le tienen especial cariño porque hace veintidós años la rescataron del abandono. Decidieron organizar una sextaferia y rehabilitarla entre todos con los materiales que les proporcionó el Ayuntamiento. Al frente, estuvieron Agustín Ordieres y Joaquín Alba. En todo este tiempo, se han ido turnando para mantenerla limpia. «Pero unos van enfermando, otros nos hacemos mayores y tenemos familiares a nuestro cargo... Cada vez es más difícil», explica una vecina. Por eso, desde hace tiempo, creen que «el Ayuntamiento debe hacerse cargo de su mantenimiento». Así se lo transmitieron a corporaciones anteriores y «algún edil del anterior mandato», pero sin obtener respuesta.
Dos de los residentes más cercanos pasaron el año pasado la desbrozadora. Este año ya no han podido. «Aun así, requiere de una limpieza más profunda, como hacíamos antes». Tal es su estado, que aseguran que una mujer se ha caído en este lugar y, «aunque no se rompió nada, estuvo dolorida un mes».
Advierten de que puede volver a pasar y con peores consecuencias ahora que se acerca el invierno. «Porque es una zona empedrada, con arboleda, donde no da mucho el sol y hay musgo».
Botellón y análisis de agua
El enclave, además, ha sido objeto de actos vandálicos. «Tenía un grifo muy bonito, con unas ranas, y se lo llevaron. Colocamos otro más sencillo y también lo robaron. El hórreo también sufrió desperfectos. La chavalería viene aquí a hacer botellón».
El presidente de la asociación de vecinos La Parpayuela de Quintes, Dioni Novel, subraya la importancia de este elemento etnográfico, «donde antaño se lavaba la ropa, se llevaba al ganado y era un lugar de encuentro». Comparte con sus conciudadanos que el Ayuntamiento asuma el mantenimiento, porque «nosotros también pagamos impuestos».
En su caso, le preocupa la potabilidad del agua, «que siempre se ha caracterizado por ser muy buena y muy fresca. De hecho, éramos muchos los que íbamos a buscar agua a la fuente». Sin embargo, con «el 'boom inmobiliario' y la falta de saneamiento, tememos que los vertidos se filtren y acaben en el acuífero. En su momento, la asociación valoró hacer analíticas. Pero cada una de ellas cuesta euros y habría que hacerlas con frecuencia. El Ayuntamiento también debería garantizar que es apta para el consumo», reclama.
Fuente: EL COMERCIO
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| El acceso fuente La Viesca, repleto de maleza. / JOSÉ SIMAL |